Una novia de Shanghai

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

DESAMPARADOS EN LA GRAN CIUDAD

Una película que nació de un proyecto loco según lo define el propio director Mauro Andrizzi. Y lo que logra, en el film realizado en Shanghái, con actores y técnicos chinos es una fábula sobre la soledad. Y además, una demostración de cómo en esa enorme ciudad que quiere competir en edificios y modas con Nueva York, en ese país que ha sufrido una transformación impresionante en los últimos años, en el imaginario colectivo queda el arraigo ancestral. Dos ladrones sobreviven como pueden, en especial robando a las novias que se fotografían pendientes de las selfies y el vestido. Se topan con un fantasma que les hace un pedido y les promete un tesoro. Deben, y lo hacen, rescatar el cadáver de una mujer enterrada con el que fuera su marido, para enterrarlo junto al cuerpo del fantasma que fue amante y así podrán ser felices para toda la eternidad. Esos dos chicos que viven debajo de los puentes o en hoteles de mala muerte, tienen por una noche todo lo que sueñan en sus manos para amasar después una esperanza contra toda lógica. Una Shanghái retratada como nunca y un espíritu entre ingenuo y trágico.