UglyDolls: Extraordinariamente feos

Crítica de Leonardo M. D’Espósito - Revista Noticias

Adolece de un didacticismo demasiado pesado, que atenta contra el diseño animado.

Lejos, muy muy lejos de su modelo Trolls, este cuento de juguetes rechazados que intentan volverse aceptables y se enfrentan a muñequitos perfectos de canción en canción adolece de un didacticismo demasiado pesado, que atenta contra el a veces muy bello, a veces muy funcional, a veces aburrido diseño animado.

Y no, es lo que sucede cuando, en lugar de Justin Timberlake, una de las voces la hace Pittbull, quien, como todo el mundo sabe, es un perro.