Rocketman

Crítica de Manuel Germano - Ociopatas

Tras su paso por el Festival de Cannes, llegó a nuestra cartelera la biografía de uno de los iconos de la música pop de todos los tiempos: Elton John (quien demostró su emoción y felicidad durante la proyección de la película en el festival). Con dirección Dexter Fletcher, un actor y director de cine inglés, que ha manifestado las ganas que tiene de ahora dirigir una película sobre Madonna (corren tiempos de biopics), y el protagónico impecable de Taron Egerton (“The smoke”, “Kingsman”), cuyo nombre saltó al estrellato y a la popularidad masiva luego de esta película.

Tras el éxito en ventas de la biopic de Freddy Mercury (“Bokemian Rhapsody“), que se alzó con varias nominaciones y premios (entre ellos el Oscar a mejor actor a Rami Malek el año pasado), la vara para el espectador de este tipo de filmes no había quedado baja: el filme de Bryan Singer logró transmitir la emoción y el espíritu de Freddy para muchos de los seguidores de la banda, espectadores de cine y parte de la crítica.

Rocketman por su lado alcanza el objetivo con creces: transmite la emoción y la calidad cinematográfica que se esperaba y sorprende con una estética impecable, actuaciones sólidas, y una fluidez narrativa que no encuentra fisuras. Elton John (quien también es productor ejecutivo de esta película) decide trasladarnos a su infancia y recorrer junto a él sus vínculos personales (relaciones que lo marcaron como persona y con las cuales tuvo que luchar durante toda su vida para seguir adelante), su pasión por la música, sus sueños, y por supuesto, su salto a la fama a muy temprana edad y las consecuencias de volverse millonario y de tener todo lo que podría un artista desear, y sin embargo no sentirse realizado en su faz personal.

El pequeño Reginald Dwight frente al piano y sus primeras notas, el chico de 11 años que logra acceder a la Royal Academy Of Music por su talento, el joven que decide dedicarse a la música para toda la vida, compositor talentoso y empedernido, trabajador incansable, artista revelación en su época, icono pop millonario, apasionado, todo eso fue y es Elton John, y la película lo expone con alegría, emoción, glam y estilo, pero lo más logrado sin duda es como Fletcher también recorre el lado más oscuro del artista y que decide contar desde la primera escena, un Elton desmejorado, adicto, devastado emocionalmente, extasiado, y que decide pedir ayuda para seguir luchando: porque no todo fue brillo y éxitos en la vida de uno de los hombres más talentosos en el campo de la música.

Y al mencionar la palabra música hay que destacar, más en este tipo de películas, no solo los cuadros musicales de gran despliegue visual si no también a la banda sonora de Rocketman, integrada por temas compuestos y grabados por Elton John para que sean interpretados por Taron Egerton. En un comunicado, el artista confesó que le confió al productor musical, compositor y multiinstrumentista británico Giles Martin el trabajo musical de Egerton. Y lo cierto es que el resultado es muy logrado, la banda de sonido encuentra en la voz e interpretación del joven actor todo aquello que cada tema tiene como objetivo transmitir.

Les comparto el link de la banda sonora completa, que pueden escuchar en Spotify:

Con rubros técnicos de primer nivel, donde se destaca, por supuesto la música Matthew Margeson, el diseño de producción, la dirección de arte y el vestuario (a cargo de Julian Day), esta biopic es una de las opciones cinéfilas más recomendables.

¡Contundente, ambiciosa y muy bien lograda: más que recomendable!