Ready Player One: Comienza el juego

Crítica de Patricia Pritzker - Chapeau Argentina

Es difícil ser objetiva cuando se admira tanto a un director como yo admiro a Steven Spielberg, pero voy a tratar de contarles de qué va y de darles mi opinión sincera. “Ready Player One” (2018) es una adaptación del libro de Ernest Cline y relata dos mundos, uno en el futuro (2045), donde vive, Columbus (Ohio) con su tía y el novio de turno nuestro antihéroe, Wade Watts (Tye Sheridan) una realidad miserable de la que quiere escapar, y el mundo creado por Halliday (Mark Rylance) llamado OASIS, donde todo es virtual. Halliday es un hombre tímido que no parece llevarse bien con el mundo real, y hasta le cuesta relacionarse con las mujeres, vive para desarrollar sus ideas y llevarlas a cabo.
El avatar de Wade es Parzival y así pasa todo el tiempo posible. En su mundo virtual conoce a Art3mis (Olivia Cooke) y a una banda de amigos que se convierten en sus aliados.
Antes de morir, Halliday, dejó ocultas tres llaves y el que las encuentre, así como también al “Easter Egg” será el poseedor de OASIS y su fortuna. Para hallar las llaves y el huevo deberán pasar varias pruebas. Gracias a su astucia, Parzival gana la primera llave y eso lo coloca en la mira de todos, sobre todo en la de el malvado Sorrento (Ben Mendelsohn) quien controla a la Empresa IOI y quien quiere quedarse con OASIS. Mientras van buscando las llaves las referencias al pasado no cesan, llevándonos en un viaje melancólico que, para los que vivimos “Fiebre de Sábado por la Noche” y “El Resplandor” (TAN bien lograda en todo sentido) entre otras joyitas, son emocionantes. La escena del Hotel Overlook de “The Shining” (1980) merece todas las felicitaciones al equipo creativo de la película porque es increíble. Hay utilización de CGI pero no se abusa, Steven Spielberg es sin lugar a dudas un maestro en el arte de contar historias, un entretenedor nato, que hace que más de dos horas se nos pasen volando y nos quedemos con ganas de más. Los efectos visuales son espectaculares como era de esperar. Llena de acción, humor y el toque de nostalgia que no puede faltar. Una de Spielberg para ver más de una vez. Mi opinión: Excelente.