Puente de espías

Crítica de Mauro Jacobo - Cinélico

Trilogía de talentos

"Bridge of spies" es lo nuevo del gigante director Steven Spielberg ("Schindler`s list", "Saving private Ryan") y ese actor enorme que es Tom Hanks ("Forrest Gump", "Saving private Ryan"). Esta es la cuarta colaboración de ambos como director y actor respectivamente, y ya se podría decir que esta mezcla prácticamente asegura una película de calidad.
En esta oportunidad nos ofrecen una historia basada en hechos reales que tiene como eje el conflicto de la guerra fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética.
James Donovan (Hanks) es designado abogado defensor de uno de los peores criminales que podían haber a finales de los sesenta, los espías soviéticos.
Primero renegando de la mal vista tarea que le habían encomendado, conoce al espía en cuestión, el enigmático Rudolf Abel (Mark Rylance), con el cual establece de a poco una relación más cercana, llegando a entender que este hombre tenía derecho a una legítima defensa ante un juicio por el cual podrían darle pena de muerte. A partir de aquí, se teje una trama de negociaciones, engaños, puja de fuerzas, política burocrática y finalmente el triunfo de la justicia.
Completan el dream team los hermanos Coen ("Fargo") en modo escritores, lo que definitivamente subió la calidad de esta historia, una narración que ya hemos visto y que podría haber sido uno más de muchos relatos, pero con esta espléndida trilogía de dirección, interpretación y guión, logró convertirse en un entretenimiento que resulta atrapante y revelador.
Es increíble como Spielberg sabe crear ambientes y atmósferas, nos traslada a esa época y a ese juego de ajedrez político entre dos potencias que no se querían ni un poco. Mención aparte merecen Hanks y Rylance que están fabulosos, tanto que este último recibió una nominación para el Oscar. La película logró 6 nominaciones en total y se configura como una de las mejores propuestas del año.
Como suele suceder muchas veces, el fanatismo de los críticos no suele coincidir tanto con el de los espectadores. Al público en general que suele gustar más de la montaña rusa de emociones, le parece un buena propuesta aunque quizás un tanto plana, con una recepción parecida a lo que fue "Caballo de guerra". Mi consejo es prestarle mucha atención y dejarse encantar por los detalles que la trilogía director, escritores y actores, le imprimió a esta propuesta de buen cine.