Orione

Crítica de Gabriel Piquet - Fancinema

LA DISTANCIA JUSTA

Hay films que se definen por su punto de vista y aproximación a su foco de interés, y más cuando se trata de un documental. Orione es una película que toma la distancia necesaria para mostrar cómo una madre vuelve a recordar la vida de uno de sus hijos, abatido por la policía luego de ser delatado por un integrante de su propia banda con la que hacían secuestros exprés.

El film de Toia Bonino apela a imágenes de grabaciones hogareñas recorriendo veranos en familia, entrega de diplomas y cumpleaños, que ayudan a conocer un poco más del joven muerto y darle entidad como persona e individuo. Mientras la madre hace actividades de cocina, se van develando detalles de cómo su hijo fue cayendo en la delincuencia y ella no pudo ayudarlo a salir, poniendo ahora todo su esfuerzo en criar a su nieto, que en un punto mantiene viva la memoria de su descendencia.

El documental va ordenando piezas por testimonios y grabaciones que terminan de armar un relato que involucra a jueces, policías, mecánicos que retocan autos robados, todos ellos de alguna u otra forma involucrados en el caso. De esta forma, Orione se configura como un relato sobre un sistema, sus mecanismos e integrantes, donde el recuerdo y la evocación son motores decisivos.