Noé

Crítica de Alejandro Venturini - Alta Peli

El director de “Requiem por un Sueño” y “Cisne Negro” estrena esta epopeya bíblica protagonizada por Russell Crowe, película polémica por las críticas recibidas de sectores católicos y censurada en Qatar, Bahrein y Emiratos Árabes Unidos.

Adaptando de Adán a Noé

Cierto es que la adaptación de textos sagrados no es fácil, no sólo por la carga cultural que poseen sino también por la complejidad y múltiples interpretaciones que éstos tienen. Pero Aronofsky, como un Cecil B. De Mille del siglo XXI, se arriesga y hace una adaptación del Génesis -primer libro del antiguo testamento que comparten las tres religiones más importantes de occidente- redoblando la apuesta y rompiendo el conservadurismo que solía darles Hollywood.

Noé (Russell Crowe) queda huérfano de chico cuando su padre es asesinado por los hijos de Caín -hombres apartados de Dios y corrompidos que se multiplicaron por la tierra-, pero ya adulto forma su propia familia junto a su mujer (Jennifer Connely), con la que tiene tres hijos y adopta a una pequeña huérfana (Emma Watson). A través de sueños y visiones, Dios le encomienda al patriarca construir un arca ya que ha decidido exterminar a los hombres por la violencia y el envilecimiento que reina mediante un diluvio.

Instrucciones en casos de diluvios

(SPOILER: Si bien la historia es conocida por todos, me di cuenta viendo los trailers y las sinopsis de “Noé” que hay elementos de la adaptación que no se mencionan pero que ocurren desde el primer acto y de los que voy a hablar, así que es responsabilidad de ustedes continuar o saltar directamente a la Conclusión)

Estableciendo un espectro temático de las adaptaciones y/o historías próximas a los textos sagrados partiendo del boom de la década del `50 con películas tradicionalistas como “Sansón y Dalila”, “Los Diez Mandamientos”, “Ben-Hur” y “Quo Vadis?”, entre otras, hasta las más controversiales como “La Vida de Brian” de Monty Python, “Water” de Deepa Mehta sobre el hinduismo y “La Última Tentación de Cristo” de Scorsese, podríamos ubicar a Darren Aronofsky en el medio.

Su película es bastante fiel con una interpretación, para mí, demasiado literal y mitológica que incluye en “Noé” gigantes de piedra llamados “vigilantes”, que son seres expulsados de los cielos y luego traicionados por los humanos en la tierra. Es cierto que en las escrituras dice “Existían entonces los gigantes en la tierra…”, pero creo que la elección de incluirlos dentro de la trama resulta rara a la diégesis de la película.

Pese a esto hay ideas interesantes como la preocupación y rivalidad de los hijos de Caín contra la familia de Noé, o la de presentar al patriarca un poco más humano, dubitativo, alguien que lleva la enorme responsabilidad de salvar a todo el reino animal en la tierra.

Conclusión

“Noé” es densa pero no por su duración sino por cómo se desarrolla la trama. Es una película que tiene tantos aciertos como desatinos en el momento de su adaptación, sobre todo por lo anteriormente mencionado, aunque el film de Aronofsky profundiza sobre esta historia bíblica con una visión singular ajena a dogmas.