Nieve negra

Crítica de Alexis Puig - Infobae

Darín vs Sbaraglia

Es en “Nieve Negra” un drama de suspenso en el que también se destacan Federico Luppi, Dolores Fonzi y la española Laia Costa

Marcos regresa a la Argentina con su esposa embarazada. Lo hace tras la muerte de su padre, para terminar de cerrar la sucesión de la herencia. Para eso tendrá que mediar con su hermano mayor, Salvador, que vive como un ermitaño en la vieja cabaña familiar, en medio de la nieve. La relación de ambos, está marcada por oscuros secretos familiares que vuelven a salir a la luz.

Martin Hodara dirige este filme intimista en un ámbito imponente: una pequeña cabaña anclada sobre el manto blanco e inmenso que forma la nieve en la montaña. El metraje avanza despacio, demasiado despacio, hasta una revelación final, que si bien no resulta sorprendente, al menos funciona para justificar ciertos aspectos de la trama.

Leonardo Sbaraglia, el verdadero protagonista del filme, encarna a un sufrido hombre que calla más de lo que dice. Ricardo Darín, con menos tiempo en pantalla del esperado, se impone sobre el resto del elenco, componiendo a un hombre de montaña, rudo, osco y de armas tomar. La relación entre ambos hermanos, no está del todo desarrollada y los baches argumentales son suplidos con tecnicismos que el director utiliza para narrar momentos presentes y del pasado. Así, asistimos a planos secuencias muy complejos que funcionan como transición para los flashbacks que nos revelan la torturada infancia de algunos miembros de esta familia.

Está claro que visualmente Nieve Negra es mucho más poderosa que argumentalmente. Lenta, pretenciosa por momentos, si el director hubiera intentado acercarse más al género, y menos al cine de autor europeo, quizás estaríamos ante una gran cinta, y no ante una película que en muchos momentos hace tanta agua como la nieve al derretirse.