Nebraska

Crítica de Lilian Lapelle - Cine & Medios

Family road movie

Woody Grant (Bruce Dern) es un hombre mayor, de esos que ya van perdiendo contacto con la realidad, y quien al recibir una publicidad en su correo se convence de que ha ganado un premio millonario por el que debe ir hasta Nebraska a retirarlo. Luego de que su familia agota paciencia y recursos en explicarle que no ha ganado nada, su hijo David (Will Forte) decide seguirle el juego, llevándolo hasta Nebraska y con esa excusa pasar unos días con su padre.
Ambos salen a la ruta en el auto de David, se embarcan en un viaje con pocas palabras, donde al principio los esfuerzos del hijo por conectarse con su padre parecen en vano. Pero una parada obligada en el pueblo natal de su progenitor le permite descubrir retazos de su pasado, y de su entorno familiar, que le mostrarán todo lo que no conocía de su padre, ayudándolo a comprenderlo.
Entre el humor y la melancolía, con una hermosa fotografía en blanco y negro que le otorga más nostalgia al relato; sin filtros, con mucha crudeza y bastante ironía, "Nebraska" es una historia familiar donde no hay moralejas ni finales felices, simplemente muestra eso que está ahí, la apatía de los pueblos pequeños, las miserias familiares escondidas, y una relación padre e hijo real, con pocos diálogos, pero muy buenos.