La noche de la expiación

Crítica de A. Degrossi - Cine & Medios

Purgante

Fábula provocadora basada en una fantasía presente en cada ser humano: cruzar un límite prohibido sin sufrir consecuencias.
En el año 2022 los EE.UU gozan de una economía floreciente, la tasa de desocupacion es nula y la seguridad reina en las calles. El nuevo Estado gobernante logró este nuevo y exitoso estándar gracias a una ley revolucionaria, que permite a todos los ciudadanos cometer todo tipo de crímenes -incluído el asesinato-, durante doce horas al año. Ese día, entre las 7 PM y las 7 AM, el país es tierra de nadie; sin policías, sin bomberos, sin hospitales, cada uno librado a su suerte. Aquellos que no desean participar de tamaño desquicio deben encerrarse en sus casas y tomar las medidas de seguridad más extremas. Precisamente, a vender esos sistemas de seguridad se dedica el protagonista de la historia, James Sandin, un amoroso padre de familia que cree en "la purga" como método para mantener en orden al país.
Todo está listo para que inicie la noche más violenta y brutal del año. Entonces el bueno de James se pone a resguardo junto a su familia en su casa, pero cuando cree tener todo bajo control algo sale mal y el terror que debería estar afuera se apodera de su hogar.
Es interesante y provocadora la idea de la anulación del pacto social, en virtud de facilitar una válvula de escape para la violencia contenida por el individuo. Maquiavelo y Hobbes, entre otros, bien trataron el tema de que el hombre es malo por naturaleza y por ello se hace indispensable el contrato social. Pero no hay que esperar de este filme que vaya tan lejos. Apenas si esboza la idea, y con trazo grueso presenta personajes maniqueos que pronto se volverán simples protagonistas de una película de terror más, con los giros y clichés del género.
El resultado es una tibia crítica a un sistema donde todos creen ser libres y decidir sobre sí mismos, cuando en realidad solo viven para servir a ese sistema, incluso dando sus vidas.