La Lupa

Crítica de Samantha Schuster - Cinéfilo Serial

La directora de “Habitares” (2014) y “Lantéc Chaná” (2017), Marina Zeising, realiza su tercer documental sobre una temática tan personal como universal: el deseo de ser madre que se entrelaza con todos los temores que esto conlleva: el embarazo, el parto, la crianza; y cómo hacer, sobre todo en la época en la que vivimos, para equilibrar la maternidad y la individualidad y/o profesión.

“La Lupa” (título que hace referencia a la loba que amamantó a Rómulo y Remo en Italia) nace a partir de estos cuestionamientos introspectivos, pero a la vez compartidos por muchas mujeres. Con una narración en off, por momentos descriptiva y otros más poética, Zeising se sumerge en un camino de autodescubrimiento y de reflexión sobre distintas cuestiones de la maternidad. Es así como, además, mantiene distintas conversaciones, distendidas y naturales, con amigas que tuvieron diversas experiencias durante su recorrido de ser madre. De esta forma podemos tener un acercamiento de primera mano sobre las etapas por las que transitaron estas mujeres, mostrando la verdadera cara de la maternidad, con sus buenos y malos momentos, y no ese estado idílico que muchas veces se ve plasmado en la pantalla. Pero también agrega voces más preparadas que hablan desde sus diferentes especialidades, para darle un marco mucho más profesional.

Otro de los puntos importantes del film y que sirve como un hilo transversal de la trama son los viajes que emprende la protagonista y directora para ir descubriendo su historia y su pasado. Es así como viaja a Italia, lugar que supo rechazar alguna vez, y Noruega, hogar de su madre. Allí pudo comprender parte de sus tradiciones y comportamientos.

A su vez, y como mencionábamos al principio, esta búsqueda se encuentra enmarcada en la época actual, un momento muy importante para el feminismo a nivel mundial, donde la mujer busca una posición de igualdad y de respeto. Es así como se abordan, además, las cuestiones de los mandatos de las distintas generaciones y cómo estos fueron cambiando a lo largo de los años, y si la maternidad se la toma como un deseo o como un deber por ser mujer. De esta manera, la directora también inserta imágenes de archivo para contextualizar la temática, como las distintas marchas feministas que se realizaron en el último tiempo en el país.

En síntesis, “La Lupa” es un ensayo sobre la maternidad en todas sus formas. Busca explorar miedos internos pero compartidos, donde los espectadores podrán sentirse identificados, y será un recorrido, no para disiparlos, pero sí para comprenderlos, como todo lo que rodea al hecho de ser madre. Un camino de autorreflexión a través de distintos componentes: charlas amenas, entrevistas a especialistas, viajes; todo lo necesario para intentar abrazar los deseos sin que sean impuestos por los mandatos sociales.