Khumba

Crítica de Rolando Gallego - Lúdico y memorioso

Una Cebra Sin Ideas

Del mismo equipo que trajo Zambezia ahora es el turno de “Khumba: La Cebra sin Rayas” (USA, Sudafrica, 2013) un filme de lograda animación centrado en el esfuerzo de la cebra del título por ser adaptada pese a su diferencia.

El director Anthony Silverston junto con la guionista Raffaella Delle Donne plasmarán en la pantalla el camino iniciático y a la vez transformador que Khumba deberá atravesar para poder comprender su particularidad y a la vez distinción.

Miembro de una manada que desde el día de su nacimiento acosa a la cebra sin rayas por justamente considerarla menor, Khumba tratará de ampliar horizontes al fugarse del grupo y comenzar a conocer el verdadero mundo.

Su idea será la de poder nadar en las aguas transformadoras de una perdida cueva, en la que, según la leyenda, las cebras obtuvieron sus rayas.

Hacia allí se encaminará y en el camino se topará con un Ñu llamado Mamá V y una torpe avestruz
llamado Bradley con los que congeniará y a su vez viajará por los lugares más inhóspitos.

Pero ellos no estarán solos, la amenaza del malvado leopardo Fango, un ser despreciable y asesino, también los acompañará hasta el destino final.

Película con ideas ya vistas, y muchos personajes que se irán sumando similares a las de otros filmes animados, “Khumba” trabaja sobre una fórmula simple y explotada.

En la idea del diferente que lucha por homogeneizarse con el resto y que finalmente brinda una lección a todos, el filme no aporta nada nuevo al ilimitado universo de películas infantiles.

PUNTAJE: 5/10