Hipersomnia

Crítica de Rodrigo Chavero - El Espectador Avezado

Para los que no conocen a Gabriel Grieco, hay que decir que hace unos años tuvo un gran ópera prima de género, que sorprendió a todos: "Naturaleza muerta". En caso de que no la hayan visto, creo que no deberían perdersela, es de lo mejor del último tiempo en el plano local.
Hoy, Grieco regresa con un elenco de actores populares y una producción importante, para ir más lejos en su desafío de contar historias originales, fuertes y sólidas argumentalmente. Y lo logra.
"Hipersomnia" es un ejemplo interesante de cómo la industria puede incoporar y animarse a explorar otros caminos entre el cine indepediente y el industrial puro.
Rara vez he visto una cinta con este nivel de producción, que ofrece un cuidado balance entre lo actoral, la atmósfera creada y lo enigmático de la trama. "Hipersomnia" es un vehículo colectivo bien hecho, que respeta todas las convenciones del género y se muestra sólida y potente para intentar atrapar al espectador local, más acostumbrado a productos extranjeros de este tenor.
Por suerte, ahora Grieco nos muestra que con el apoyo adecuado, se pueden hacer en Argentina. La historia es la de una jóven aspirante a actriz, Milena (Yamila Saud), que interesada en formar parte del elenco de una obra teatral, sigue a rajatabla las indicaciones del director de la misma, Federico (Gerardo Romano). El sutilmente va aplicando una dosis de hipnosis en cada sesión con Milena, lo que genera consecuencias en la percepción de su realidad.
Milena comienza a tener problemas con su novio (Nazareno Casero) y experimenta una vivencia paralela de otro mundo, donde las cosas no pintan nada bien. Las influencias son muy visibles. "Hipersomnia" integra la crudeza de "Hostel" y el estado onírico de "Sucker Punch" en un envase seductor y potente.
Chicas cautivas, víctimas de trata sufrientes que intentan encontrar salida a ese perturbador universo, en una doble instancia donde nada es claro y la obra y la vida ofrecen matices distintos, que se entrecruzan peligrosamente. Grieco usa todo su repertorio para instalar clima y propuesta y logra, merced a buenas interpretaciones (Jimena Barón, Vanesa Gonzalez y el ascendente Peter Lanzani se encuentran entre lo mejor del film), que el relato no ofrezca desniveles y se posicione intenso y provocador.
Es importante que sepan que acá nada se guarda y algunas escenas pueden ser un poco crudas para el espectador desprevenido. Todas justificadas por la historia, desde ya. Sensual, profunda y con todo el gancho para los jovenes y los amantes del cine de género,"Hipersomina" es otro paso adelante en pos del crecimiento de un espacio para el mercado local.
Hay muchas cintas extranjeras que cada semana buscan convocar al espectador que en gran número, las elige a pesar de su dudosa calidad. Esta es buena de verdad y hay que apoyarla para que nuestra industria se siga consolidando.