Hipersomnia

Crítica de Jorge Marchisio - Cinergia

Escalofríos

En esta ocasión hablaremos de Hipersomnia, un film de horror argentino, que intentando darle una vuelta de tuerca a la historia, se mete con el complicado tema de la trata de mujeres y las redes de prostitución. Y por desgracia tenemos que decir que ahí termina lo más interesante del film, su idea original, porque su ejecución, dista bastante de ser satisfactoria.
El mayor error que se le puede achacar a la película es que la unión de los géneros de terror con el caso policial, no solo se siente antinatural y que está poco trabajado, sino que además chocan entre sí, haciendo que uno le saque peso al otro, y que cuando uno estaba tomando importancia, rápidamente nos recuerdan que también es un film de horror/thriller.
Así es como por un lado tenemos muchos elementos de horror, como la claustrofóbica situación que padece Milena al soñar que es una prostituta, que además son maltratadas por sus clientes, y en especial, por un ser que recuerda a Cara de Cuero, y que es totalmente innecesario en la trama; o peor aún, es absurdo. Todo intentando convivir con la parte policial de ellas escapándose o al menos, dar aviso a alguien del exterior que están ahí. Pero parece que el guion no estaba del todo trabajado, ya que veremos de forma constante como un género choca con otro, o peor aún molestando al otro.
Por el lado actoral, los actores hacen lo que pueden con sus personajes, pero además de eso, están muy mal casi todos. Personajes como Nazareno Casero que dio sobradas muestras de ser un buen actor, acá debe dar una de las peores interpretaciones de su carrera. Apenas Florencia Torrente con un par de líneas de diálogo le alcanza para ser lo mejorcito del casting.
No todo es malo en Hipersomnia, y hay que destacar los pocos elementos positivos, como por ejemplo la fotografía que no tiene nada que envidiarle a producciones con mayor presupuesto. O el hecho de haber querido innovar y presentar un tema que no es tan utilizado en el cine argentino.

Hipersomnia pese a esto último es muy floja y aunque uno siempre quiere defender el cine local, hay que ser justos y decirlo. Queda en el espectador si pese a todo le da una oportunidad y se decanta por una opción menor y nacional, por sobre otros films malos de horror que venimos viendo y que aún así obtienen una gran taquilla.