El provocador, primeiro filme en portuñol

Crítica de Juan Pablo Russo - EscribiendoCine

Actuar para vivir

El provocador, primeiro filme en portuñol (2011) es un film documental de investigación, articulado desde las vivencias de un grupo de militantes actores que durante la última dictadura argentina debieron exiliarse en Brasil. El trío de realizadores reconstruye el pasado de estos hombres y mujeres que usaron el teatro como una excusa para convertirse en actores sociales.

La historia se centra en un grupo de estudiantes de teatro que en plena dictadura militar realizaban performances desafiando el clima reinante. Tras la detención y posterior fuga de su principal referente, el director Juan Uviedo, sus discípulos lo siguen hacia Brasil donde en Sao Thomé das Letras fundan una organización para albergar niños carenciados, sin dejar de actuar y siempre desde la provocación.

Silvia Maturana, Marcel Gonnet y Pablo Navarro Espejo reconstruyen el pasado desde el presente. Para eso se valieron de los testimonios de los propios protagonistas quienes desde el hoy evocan el ayer para, desde sus recuerdos, colocar cada una de las piezas que cerrarán el círculo. Así nos conducirán por más de treinta años de historia política, lucha social y teatro vanguardista.

El provocador, primeiro filme en portuñol como su título lo indica está hablado en “portuñol”, esa extraña mezcla de portugués y español que con el tiempo fueron adquiriendo los propios protagonistas del relato. El título funciona como una analogía del contenido. La provocación no está sólo en lo que se cuenta sino en la forma que se eligió para hacerlo, en este caso desde un lenguaje no tradicional.

El cine documental es una forma válida para reflejar el pasado y el presente de los pueblos. Muchas veces hay historias que la misma historia se olvidó de contar y que el cine rescata llevándosela a los pueblos que no quieren (y no pueden) olvidar. El provocador, primeiro filme en portuñol es uno de esos casos y esperemos que no el último.