El muerto cuenta su historia

Crítica de Matias Seoane - Alta Peli

El Muerto Cuenta su Historia es el nuevo aporte que le hace Fabián Forte al cine de género argentino, donde utiliza elementos clásicos del terror fantástico para hablar con ironía del sexismo naturalizado por la sociedad.

Venganza matriarcal:
Siendo realizadores publicitarios Ángel y Eduardo saben bien que el sexo, representado en una mujer atractiva, vende. También saben que para sus clientes la combinación de delgadez y juventud es lo que ubica la vara de la belleza, parámetros que ellos comparten al punto de considerar a las actrices que contratan para sus producciones como poco más que el elemento más llamativo de la escenografía. Inmerso en ese mundo superficial y plagado de tentaciones, Ángel es sistemáticamente infiel a su esposa. Pero sus aventuras clandestinas lo llevan a morder la carnada de un grupo de mujeres adoradoras de una antigua diosa celta. Derrotada milenios atrás y que, con el poder unas sanguinarias criaturas mitológicas, están capturando hombres para volverlos esclavos al servicio de su misión. Pero nadie dice que necesitan estar vivos para ser útiles.

Lo normal entre cerdos megalómanos:
El argumento es bastante simple y no pretende sorprender con giros rebuscados, anticipando una síntesis completa de la trama en los dos minutos del trailer para que el interés caiga directamente sobre el contenido que le da carne al esqueleto. El tono de la película va cambiando a medida que Ángel descubre y se acostumbra a su nuevo estado de muerto vivo haciendo uso de mucho humor negro que desemboca en un absurdo asado entre muertos que es uno de los puntos más altos de toda la película. Esa transición entre la crítica al snobismo y la comedia negra mantiene siempre un trasfondo de crítica al machismo que todas las víctimas del aquelarre tienen internalizado como una parte fundamental de sus personas, hasta que les es arrancado a la fuerza. Incapacitados de hacer o decir nada sexista pero no de pensarlo, se ven forzados a replantearse ideas que aceptaban como naturales sin nunca haberlas analizado en el camino a descubrir lo que realmente define sus identidades en el camino a reinventarse. Irónicamente, todo ese discurso anti-sexista y crítico de la objetualización femenina no impidió que utilizaran fuertemente la imagen de Emilia Attias (Cromo) para la publicidad de la película a pesar de que con apenas algunas líneas en dos escenas está lejos de tener una participación importante en la trama, como tiene Moro Anghileri (La Corporación) interpretando a la esposa de Ángel o en menor medida Viviana Saccone (Necrofobia) encabezando los rituales. Pero como en el fondo se trata de una reflexión masculina sobre el feminismo que no superaría el test de Bechdel, el rol protagónico recae sobre la buena química entre el ya reconocido exponente del humor absurdo Damián Dreizik y Diego Gentile, al que conocimos como otro marido infiel en uno de los fragmentos más recordados de Relatos Salvajes. Pocas de sus interacciones no incluyen alguna situación cómica, manteniendo interesante y divertida a la película en todo momento.

El punto más flojo de El Muerto Cuenta su Historia es uno recurrente en este tipo de producciones que tienen intenciones de mostrar situaciones fantásticas visualmente atractivas pero tienen recursos limitados para llevarlo a cabo, porque aunque los efectos prácticos y las prótesis cumplen bastante bien tanto cuando pretenden realismo como cuando van por el camino del absurdo, cuando recurren a los efectos digitales se ven fuera de contexto e innecesarios, sobre todo contrastando con el resto del tiempo en que usando otros recursos logran construir un clima con una personalidad más identitaria.

Conclusión:
Con un guión sencillo y algunas fallas técnicas, El Muerto Cuenta su Historia es una divertida comedia negra que se apoya en el cine de género para criticar la superficialidad del ámbito publicitario que convierte a la belleza femenina en un bien de consumo pero sin perder de vista que la meta es entretener al público, no educarlo.