El día que cambió la historia

Crítica de Natalia Trzenko - La Nación

Un documental que abarca demasiado

El título de este documental hace referencia al 17 de octubre de 1945, pero comienza mucho antes. En realidad, los hechos puntuales de ese día recién aparecen en el tramo final del recorrido, que entremezcla lecciones de historia con escenas ficcionalizadas y los testimonios de quienes participaron de esa jornada fundamental para la historia argentina. El relato elige retroceder hasta fines del siglo XIX para explicar los orígenes del movimiento obrero peronista desde el punto de vista de los trabajadores de los frigoríficos asentados en la zona de Berisso. Un interesante y rico recorte en términos históricos que no se llega a plasmar en lo cinematográfico. Por momentos manual de historia con ánimo didáctico y expositivo que incluye recortes de diarios de la época y los aportes académicos de historiadores como Osvaldo Bayer, Norberto Galasso, Sergio Pujol y Roberto Tarditti y por otros floja ficción que utiliza viñetas protagonizadas por Lito Cruz y Rubén Stella para intentar personalizar lo que la voz en off explica con datos. Una estrategia innecesaria que estira y suma escenas que no agregan demasiado a lo que se quiere contar. Así, en una de esas secuencias ficcionalizadas se intenta resolver en pocos minutos y sin demasiadas sutilezas la relación entre la movilidad social de los trabajadores y sus consumos populares utilizando el tango como ejemplo. Un tema que daría para varios documentales y que aquí es tratado sin mucho rigor. Apenas una excusa para introducir una escena absurda entre Cruz y Stella, un paso de comedia tan innecesario como anacrónico además de la participación de Amelia Bence como una cabaretera milonguera que canta el tango "De mi barrio".

Por otro lado, cada vez que aparecen los testimonios de los testigos directos del surgimiento del movimiento obrero en los frigoríficos y sus recuerdos del Berisso de aquellos tiempos, de su cotidianeidad y su lucha, este documental insinúa lo que podría haber sido, pero no es. Es allí, en la familiaridad de esos hombres y mujeres -ya ancianos- y su rescate emotivo y político de los hechos y personas que llevaron al histórico día del título donde el film escrito y dirigido por Jorge Pastor Asuaje y Sergio Pérez muestra su verdadera fuerza e interés. Una historia atrapante -además de relevante-, que no logra traducirse en un documental de igual medida.