Diablo

Crítica de Jonathan Plaza - Función Agotada

Cine de culto

Diablo es una comedia gore que narra los sucesos que transcurren en la casa de Marcos luego de que su primo Hugo lo visite y previo a lo que será un encuentro de reconciliación con su ex-novia. A partir de la llegada de su primo, Marcos recibirá muchas más visitas, todas ellas desafortunadas.

La película está llevada adelante magistralmente por Nicanor Loreti que demuestra en este, su primer film, tener una muy buena muñeca para manejar los desbordes, ya que Diablo en argumento y en estructura narrativa coquetea constantemente con el caos, pero siempre manejándolo a su beneficio, algo logrado de manera orgánica por un montaje veloz y vertiginoso que permite palpitar lo absurdo y violento de las situaciones de las que Marcos es victima. Este film, fiel a su estilo, sólo busca divertir, su argumento no presenta ninguna pretensión mayor que mantenerte en la butaca con una sonrisa constante y la incertidumbre de no saber qué tan profundo y oscuro es el lío en el que están metidos los personajes y para hacerlo se aferra a la cultura del VHS incluyendo secuencias que recuerdan a comedias nacionales de culto como Los Exterminators y contando con actores como Hugo Quiril (Kato, El Ninja Blanco) que refuerzan ese clima nostálgico.

Diablo es la punta de un iceberg, es una película que continua con una ya tradición de cine independiente Argentino llevado adelante por muchos realizadores que de la mano del video exploran la comedia gore. Farsa Producciones fue seguramente una de las encargadas de hacer explotar esta cultura y abrir muchas puertas pero no hace falta más que asistir a alguna de las emisiones del B.A.R.S (Buenos Aires Rojo Sangre) para darse cuenta que esto ya no es un fenómeno sino que es todo un género en el que muchos realizadores están trabajando hace tiempo, un género que a pesar de tener referencias de otros estilos tiene una identidad propia y bien marcada. No puede definirse a este tipo de cine como splatstick ya que la comedia en ellos transita por otros lugares, es más "argumental" que física, coinciden en el humor negro y la critica oculta a ciertos aspectos culturales y sociales pero sobre todo coinciden en pasajes que "citan" a otras obras fílmicas como homenaje (la mayoría de los realizadores de este género son cinéfilos asumidos) y como parodia no a la obra citada sino a la relación que surge del contraste de culturas de aquella y ésta que la trae, un claro ejemplo de esto en Diablo se da en una secuencia que parodia la balacera final en Scarface, sin dar demasiados detalles voy a decir que la búsqueda de Tony Montana y la de Huguito no distan demasiado, lo que dista son las personalidades de ambos y sobre todo su contexto social, es por eso que esa balacera tiene finales diferentes, una analogía similar puede hacerse entre la gloria del deportista campeón hollywoodense y Marcos, el Inca del Sinaí en cuanto a logros y situación social. La película recurre a relaciones simbólicas invertidas como una constante para la comedia como al revelarse que el diablo que le da nombre al film es un Robin Hood anarquista que tuvo una epifanía proletaria.

Ver una película como Diablo en un cine comercial y alejada del contexto de algún festival es realmente una alegría, es una manera de tomar consciencia de que el cine no tiene razón para caer en los clasicismos que lo obligan a vivir a las sombras de otro cine, estrenar Diablo comercialmente es blanquear una situación latente en el under Argentino, bravo por eso!