Caminando con dinosaurios

Crítica de Rolando Gallego - El Espectador Avezado

Con un detallado trabajo de reconstrucción y animación “Caminando con Dinosaurios”(USA, 2012), coproducción entre Fox y BBC, podría haber deambulado entre el documental y la serie animada de divulgación científica. Pero lo que pudo ser algo tedioso y triste, gracias a la hábil dirección de Barry Cook (“Mulan”, “Arthur Christmas”) la película supera la prueba de transformar un éxito televisivo en una entretenida película.
Ya desde el arranque, con un homenaje al género (una camioneta con niños entrando en una especie de parque hablando de lo divertido o no de buscar restos fósiles de dinosaurios) en el que uno llega a pensar, no, no pueden copiar a “Jurassic Park”, no lo hacen, y trasladan la acción con humanos a dinosaurios. Así conoceremos a Patch y sus amigos, un pachyrhinosauro, al que acompañaremos por su viaje épico e iniciático.
El 3D en esta oportunidad se luce, en un filme en el que atravesaremos varias sensaciones al lado de la manada de dinosaurios, en una historia que además del amor y la amistad, reflejará el intento de supervivencia de un personaje que todo el tiempo intenta ubicar su raciocinio sobre su instinto. Aunque esto le cueste hasta la segregación del grupo.
Hay ciertas similitudes con otras películas animadas como “Antz” ó “Bee Movie” en esto de un ser/insecto/animal o dinosaurio que de pronto se da cuenta que en sus vidas no quieren ser como los demás y comienzan a cuestionar el statu quo en el momento en el que su padre muere, su madre desaparece y hay que “migrar” por el invierno.
En la manada de Patch el liderazgo se gana a través de un duelo de fuerza, y él sabe que esto no es determinante de nada, ya que seguramente, al ser pequeño (por contraste con su testarudo hermano “Mal Gesto”), las oportunidades para poder dirigir serán casi nulas.
Pero él tratará de superarse todo el tiempo, y en esto mucho tienen que ver sus amigos. Patch no estará solo en la travesía, lo acompañará Alex, un ancestro de las aves actuales, que además será el narrador omnisciente de la película, y gracias a él podremos acompañar a los dinosaurios por su hábitat natural (o al menos por el que se cree que fue) y vivir las mismas sensaciones que van aconteciendo a la par del relato.
También estará Juniper, la bella de la manada, el objeto prohibido de deseo del dinosaurio ( y de su hermano), ya que al pertenecer a otra manada, le es imposible llegar a ella.
La animación en CGI y la utilización de trazados gráficos y stopmotion, como así también los “parates” de la acción para contarnos las características de los dinosaurios dinamizan aún más el relato. Algunas máximas que pueden ser utilizadas en cualquier ámbito como “si quieres saber dónde está la comida, sigue a los gordos”.
La rebeldía, seguir o no al líder, salir a la vida, sobrevivir siendo el más pequeño de un grupo, ver cómo relacionarse con los pares, de estos temas habla “Caminando con Dinosaurios”, una vuelta de tuerca a la divulgación científica que encontrará en el público infantil su lugar para quedarse.