Cadáver

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

El debut del holandés Diederik Van Rooijen en EEUU tiene aciertos y “homenajes”. Primero es una buena decisión el titulo de estreno en muestro país, ya que en el original hablaba de una posesión que se resuelve en los minutos previos a los títulos. Después es acertada la elección como escenario casi único de la morgue enorme y gris, oscura y amenazante donde ha elegido trabajar una ex policía con “problemitas”. Todo bien hasta que llega el cadáver en cuestión mutilado y quemado y con un ojo de impresionante color zafiro abierto. Un cuerpo con malas costumbres donde el demonio se siente cómodo y se desplaza al estilo “caminata de la araña” de Linda Blair .Una entidad malvada inquieta La película no pasará a la historia del género por innovadora, pero mantiene al espectador en vilo durante casi todo el tiempo, con efectos de sonido, silencios y buenas luces. Un aspecto llama la atención en un filme que parece enfocado en el entretenimiento: el señalar las depresiones y adicciones como el verdadero terror de la época. Después de verla podemos analizar algunos deslices del argumento, que los tiene. Y preguntas para futuros filmes: ¿por qué los exorcistas insisten si siempre pierden?, ¿por qué el demonio mata pero no pude desatarse de la cama? Y así seguir para entretenerse con guionista rutinarios. Este cadáver no apesta y eso es bastante.