Cacería de brujas

Crítica de Rodrigo Chavero - El Espectador Avezado

A la hoguera con ella!

Hace un mes hablábamos de "Drive Angry 3D", cinta en la que Nicholas Cage hacía un rol deslucido, pero entretenido, mostrando que su criterio de selección de roles es, cuanto menos, extraño... O no, si se privilegia lo económico... Pero decíamos informalmente, que era extraño ver a Cage haciendo tantos papeles distintos, en films de guiones poco convincentes y pobres siendo que es un actor de cierto prestigio en la industria. Recordemos "Leaving Las Vegas", "Raising Arizona", "Bringing out the dead", etc, trabajos potentes en los que se lo apreció por su enorme talento a la hora de ponerse en la piel de ciertos personajes. Luego, bueno, se dedicó mayormente a aumentar la taquilla de películas netamente pasatistas ("Con Air", "Natural Treasures 1 y 2", y siguen las firmas) y en este momento, no es sinónimo de adhesión incondicional por parte del público cinéfilo. Es un actor popular, pero sus últimas producciones están lejos de su mejor forma. Ahora, nos llega "Season of the witch", película de Dominique Sena (al que recuerdo especialmente por "Kalifornia", su mejor trabajo) en la que seremos transportados hacia la alta edad media, a presenciar un conflicto típico de la época: el trato de la iglesia católica con la brujería.

Al comenzar la proyección, conocemos a dos grandes amigos y compañeros de armas, Behmen (Cage) y Felson (Ron Pearlman), ellos son cruzados y están acompañando las órdenes de un obispo, en busca de avanzar hacia Tierra Santa. Batallan duramente y logran sobrevivir a tremendos enfrentamientos con los "infieles", hasta que al llegar a un poblado, las autoridades de la columna deciden masacrar mujeres y niños en un pueblo a mansalva, y eso marca el fin de la tarea. Behmen y Felson desertan de la fuerza y comienzan a hacer otro camino. Atraviesan campos, descansan en alguna vivienda abandonada y se van familiarizando con la peste, que asola la región. Cuando llegan a un poblado, son descubiertos y acusados de traición por haber dejado el ejército cruzado. Para poder conmutar la pena, se les ofrece una tarea particular: deben transportar a una bruja, desde ese castillo, hasta una abadía que está a cinco días de distancia. La mujer en cuestión se autoproclamó autora de la llegada de la peste a la comarca, con lo cual, los obispos y autoridades militares de ese lugar buscan enviarla hacia los mejores eclesiásticos de la zona, quienes enjuiciarán a la joven, para comprobar la veracidad de sus palabras y actos. Poco después de negarse a hacerlo, Behmen y Felson cambian de opinión y deciden aceptar la oferta, pero piden varios compañeros de viajes para la travesía: un sacerdote (Stephen Campbell Moore), un soldado (Ulrich Tolmsen), y un guía (Stephen Graham) serán parte del equipo que trasladará a la posible bruja hasta la abadía donde los religiosos tomarán las decisiones que hagan falta.

Lo central del film será, obviamente, el viaje a través de peligrosos bosques hasta llegar a destino. En ese trayecto, se verá cuánto de cierto hay en la acusación de brujería que se le hace a la mujer prisionera...

El guión es simple, sin mayores matices, casi diría, clase B. Un par de actores conocidos (hay un pequeño papel de Christopher Lee!), ambientación acorde a la época bien lograda, música sombría y atmósfera sobrecogedora. Ah, y luchas con espadas. Y arcos, ballestas. Bien medieval. Nada más.

La cinta es anodina, nunca logra despertarnos interés y a pesar de que estamos viéndola por Nicholas Cage, el hombre no se da por aludido. Tiene líneas poco imaginativas, mechadas con algo de humor negro y todo el tiempo parece estar desconcentrado, como si esperara que abriera el banco para ir a cobrar su cuantioso cheque y no le quedara otra que hacer la espera en cámara... Pobre trabajo de un actor que está perdiendo el rumbo.

No hay mucho más para contar, "Season of the witch" es un film decididamente menor. No vale el precio de la entrada actual y lo mejor que pueden hacer es esperar su lanzamiento en el cable para verla, si todavía después de esta crítica tienen curiosidad por ella...