Blindado

Crítica de Ricardo Ottone - Subjetiva

“Blindado”, de Eduardo Meneghelli
Por Ricardo Ottone

En 2018 Eduardo Meneghelli estreno dos largometrajes, Román y Ruleta Rusa, ambos enmarcados dentro del género thriller policial, y seis meses después del estreno de la última llega con su tercer largo. Blindado se ubica más o menos dentro de los mismos parámetros de género al que se le suman elementos de drama psicológico y de Heist Movie o película de atracos. Aunque en este último caso el golpe es más bien secundario, ya que si bien el relato se va dirigiendo hacia su posible consumación, es más un medio para un fin antes que un fin en sí mismo. Y es que ese fin es aquí el intento de redención del protagonista. O lo que él cree que va a llevarlo a la redención.

Luna (Gabriel Peralta, que es también actor protagónico de los anteriores film de Meneghelli) trabaja como chofer en una empresa de transporte de caudales. Se encuentra de licencia psiquiátrica porque no hace tanto sufrió un accidente de ruta donde murieron su mujer y su hija, pero se las arregla para volver al trabajo porque sostiene que mantenerse activo le va hacer mejor a su recuperación. Sus empleadores y compañeros le creen al principio pero estos últimos perciben que Luna, fanatizado por el discurso religioso y con algunas salidas incómodas, no está muy bien ajustado realmente. Y eso que ni siquiera están al tanto de la otra obsesión que nuestro protagonista tiene el buen tino de no contarles. Resulta que Luna tiene un sueño recurrente que replica casi la escena del accidente, pero en lugar de su esposa y sus hija toman el lugar una mujer que trabaja haciendo limpieza en la empresa y el hijo de esta. Luna interpreta el sueño como un llamado y trata de hacerse amigo de la mujer a la vez que la sigue, la investiga, la espia y hasta se acerca a su hijo como casualmente. Descubre en el medio una situación donde la mujer está siendo víctima de abuso por parte de personaje que podría ser su amante, o alguien que simplemente la explota, y eso lo confirma en su misión de rescatarla.

Lo que va pasando a primer plano es la evolución psicológica de Luna y su paulatina caída en el delirio místico y mesiánico. Hay una influencia notoria de Taxi Driver (1976) en los elementos de la trama: La alienación del protagonista y su extrañamiento de los otros, la imposibilidad de superar su trauma, el mandato incuestionable y la certeza en su misión, la obsesión con una mujer a la cual quiere rescatar de un mundo al cual ve como corrompido y sucio. Es tal el paralelismo que tenemos una escena con un guiño explícito (tan explícito que es hasta un poco grueso) con un personaje secundario haciendo una cita textual del film de Scorsese. Como para dejar en claro que la referencia es consciente y a propósito.

El elemento místico toma preponderancia en la mente de Luna y esto se hace más evidente en la forma obsesiva (y van) con que escucha un predicador de radio, tanto en su casa como durante los viajes que hace en el camión blindado para penuria e incomodidad de sus compañeros. Este discurso en off (que suena en tono más como el de un locutor que como el de un predicador real) se impone también como recurso y suena en varios pasajes al mismo tiempo que una tomas aéreas del camión circulando, como una suerte de perspectiva de Dios observando desde lo alto el deambular de sus criaturas. Justamente la circulación en el camión pero en su interior, mostrando la cotidianeidad de Luna y sus compañeros, es la aporta cierta carnadura y credibilidad aunque los diálogos sean algo estereotipados (los trabajadores alardeando de sus conquistas o la forma evidentemente condescendiente con que tratan a su chofer). Mientras tanto Luna se dirige inexorable a su misión, blindado por su delirio a cualquier razonamiento, mientras el espectador, al principio solidario, se siente cada vez más extrañado de el.

Blindado es un policial correcto aunque previsible, con una puesta tradicional de parámetros industriales. Y si bien el referente más obvio está en un film americano de los 70, formalmente está más cerca del cine policial argentino de los 80 y principios de los 90, un tipo de cine que uno tiende a creer perimido pero que vuelve con insistente frecuencia.

BLINDADO
Blindado. Dirección: Eduardo Meneghelli.
Intérpretes: Gabriel Peralta, Aline Jones, Luciano Cáceres, Luis Ziembrowski, Facundo Aquinos, Lautaro Delgado, Esteban Menis, Gonzalo Urtizberea. Sandra Smith. Guión: Leonel D’Agostino. Basado en un libro original de Luis Saez y Tomas Foti. Fotografía: Gustavo Biazzi. Música: Guillermo Pesoa. Edición: Juan Pablo Docampo. Dirección de Arte: Alicia Vazquez. Producción: Fer Rubino, Mario Levit. Producción Ejecutiva: Fer Rubino, Nicolás Batlle. Diseño de Producción: Cadi Martín. Distribuye: Cine Tren. Duración: 82 minutos.