Arabia

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Un hombre que escribe un diario, que nació y vive sin nada, solo con los recuerdos de una mujer, de un hijo que no llegó a gestarse por completo, de una pequeña cuota de amor para una vida cuyas posesiones caben en una caja de cartón. La historia de un hombre de los caminos que puede emplearse de lo que sea: picar piedras, recoger frutas, o estar en una fundición. Pero por sobre todo la comprensión de los desheredados. Las imágenes y las palabras bellamente escritas, no necesitan de un discurso panfletario. Toda la vida de ese protagonista es manso y desposeído, un manifiesto en si mismo: sin derechos, generalmente estafado, condiciones de vida paupérrimas, recuerdos y menciones a otros tiempos todavía peores, de esclavitudes y represiones. Una existencia de comprensiones durísimas, de lirismo seco, de tristeza sin fin como rezan los poemas cantados. La película dirigida por Affonso Ucoa y Joao Dumans tiene una cruza de cine y literatura, de calidad inusual y conmovedora.