La obsesión por la fama y muestra lo más oscuro del ser humano en una historia coral. Creo que siempre es bienvenida una película del cineasta canadiense David Cronenberg (“Una historia violenta”; “Promesas del este”; “Un método peligroso”) su filmografía es audaz, provocadora, maneja muy bien el gore, lo turbulento, es mordaz y cruel, y sabe llevar al cine grandes novelas, un claro ejemplo es lo que hizo con las de Stephen King, entre otras. Lo que nos muestra en esta ocasión es una comedia bien negra y una sátira donde cuenta la decadencia y degradación, haciendo una cruel radiografía de ciertas figuras de Hollywood y lo que cuesta la fama y lo que son capaz de hacer por ella. Nos encontramos frente a una actriz llamada Havana Segrand (Julianne Moore), que quiere volver al cine pero no le quieren dar el papel porque ya es grande, y ella se encuentra desesperada con esto; desea encarnar a su madre (en una remake), quien fue una gran actriz, (ella tuvo una mala relación esta), es neurótica, toma pastillas y por momentos se deprime, y contrata al terapeuta de moda, un especie de gurú: el Dr. Stafford Weiss (John Cusack). Otros de los personajes son dos hermanos: Benjie Weiss (Evan Bird) de unos 13 años, que representa al actor de moda, insoportable, maltrata a todo el mundo, insulta, es competitivo, se lleva muy mal con sus padres, y su hermana Agatha Weiss (Mia Wasikowska, "El secreto de Albert Nobbs”) lleva las marcas del fuego en su piel después de un accidente, acaba de salir del manicomio, llega a Los Ángeles y tiene fascinación por conocer al jet-set, terminando como asistente de la diva Havana. Agatha conoce allí a Jerome Fontana el chofer de la mansión que maneja la limusina y tiene aspiraciones artísticas (Robert Pattinson, vuelve a trabajar con Cronenberg). Todo gira a través de la mirada de estos dos hermanos que solo buscan fama y un lugar en el mundo de las estrellas. La historia resulta atrapante, tiene intriga, suspenso, sexo, violencia, gore, maldades varias, sangre, drogas, escatología (alguna de las escenas se muestra el momento más íntimo cuando está en el baño estreñida. Hasta se ha llegado a vender la materia fecal de algún actor), lesbianismo, ver el lado oscuro de los actores, retrata la realidad, muy interesante y despiadada. Cuenta con destacadas actuaciones, y el trabajo sobresaliente de Julianne Moore (está pautado el estreno en Estados Unidos para el 27 de febrero 2015, por lo tanto podría ser nominada a los Premios Oscar en 2016), en una actuación magistral. Es una sátira que toca temas como: el precio de la fama, la obsesión por la popularidad y como influye Hollywood en la cabeza de estos personajes. Con un toque surrealista, se muestran todas las miserias humanas mediante diálogos fuertes (el director a la hora de mostrar no se priva de nada), una dura mirada a la sociedad de consumo y toques psicológicos sobre los aspectos más ocultos y perversos del alma humana. No es lo mejor de Cronenberg pero es grato de ver este film.
Una historia de amor con conflictos tecnológicos. Esta es la ópera prima de Emilio Tamer, co-dirigida por Federico Finkielstain, quienes también lo dirigen a Martín Bossi en el teatro en “Bossi Big Bang Show”, y ahora logro su debut protagónico en el cine. Ya en agosto de 2011 logra su primer papel en “Viudas”, de Marcos Carnevale, junto a Graciela Borges, con un divertido personaje (una mucama paraguaya). Lograba su primer protagónico poniéndose en la piel de Alberto Olmedo en la película “El Negro Olmedo”, sobre la vida del emblemático humorista pero por problemas económicos se suspendieron las grabaciones y hoy en la actualidad se está dando el gusto realizando un sketch personificando a Olmedo, junto a Carna como Javier Portales, en los emblemáticos papeles de “Alvarez y Borges”. En esta película muestra los días de un comediante de stand up y profesor de teatro que se reúne con sus amigos, para hablar de: trabajo y sus problemas, comen, cuentan anécdotas y su mejor amigo es Pedro (Manuel Wirzt). A la hora de dictar sus clases es muy estricto, y entre sus alumnos se encuentra Guadalupe (María Soledad Zamarbide, también es su debut en cine, bonita pero poco expresiva), una joven ejecutiva que necesita triunfar en su trabajo, superando varios temores, vencer sus dificultades y para ello toma estas clases a pedido de su jefe. Después de algunos enredos, sucede lo previsible: el amor entre el profesor y la alumna. Los dos son polos opuestos que se terminan atrayendo; ellos pasan varias horas juntas y lo comienza a invadir, ahogar, todo lo que él criticaba sobre la tecnología ingresa a su vida (selfies, facebook, twitter, whatsAAp, Instragram, entre otros), ella quiere que él triunfe en su profesión. Lucas ingresa en una encrucijada, llega un momento que todo hace un clic y la pareja se transforma en mediática, apareciendo en todas las redes sociales y entrando en crisis. El film se divide en varias partes y no hay tiempo para cerrarlos, se mezcla la comedia, el drama y el romance, su desarrollo con el correr del tiempo resulta poco atractivo, porque todo parece que fue apresurado: su guión, filmación y preparación. Termina siendo pretenciosa, y con un final algo polémico. Los actores secundarios no aportan demasiado y algunas escenas son poco creíbles. Hay un exceso de Bossi, quien se pone un poco la película al hombro, toca temas similares a los que habla en su espectáculo (critica a la tecnología, los mediáticos, entre otros), él cuenta con una gran habilidad para hacer emocionar, imitar gestos o voces y caricaturizar muy bien, acá lo hace pero le falta tiempo para explotarlo bien. Cuenta con algunos cameos de: Graciela Borges, Carlitos Balá, Ari Paluch, Leo Montero y de los productores televisivos Chato Prada y Federico Hoppe, entre otros, (una gran mezcla, estos con sus típicos gestos o frases). Lo mejor es la música, tema principal "Adonde" por Manuel Wirzt; “Plegaria para un niño dormido” de Spinetta, “Corazón delator” de Soda Stereo, entre otros, bellísima la fotografía en esas calles de Buenos Aires y Paraná de las Palmas.
¿Una nueva Chuky? Dentro del género de terror existen varios elementos que resultan atractivos, resulta efectivo lo que es poseído, como lo fue el muñeco “Chucky” ya pasado de moda. En esta oportunidad se trata de un spin-off de la exitosa “El conjuro”, de James Wan, que recaudó más de 318 millones de dólares con un presupuesto de unos 20 millones. Para darle un mayor efecto a su relato, se cuenta que la muñeca Annabelle se encuentra en un museo dentro de una urna de cristal, (fue fabricada por Raggedy Ann en 1915) y que una mujer le regala a su hija una muñeca de esta marca y comienzan a suceder hechos extraños. Quienes los comienzan a investigar son los parapsicólogos Ed y Lorraine Warren en 1970 y descubren que se encuentran frente a algo que está considerado como uno de los fenómenos paranormales. Todo gira en torno a John Gordon (Ward Horton) quien está casado con Mía (Annabelle Wallis), que se encuentra embarazada. Ella es coleccionista de muñecas y le regalan una que es antigua, difícil de conseguir y que luce un vestido blanco de novia. Pero el encanto de Mía con Annabelle no durará mucho. El matrimonio pasa una noche horrible, cuando su hogar es invadido por miembros de un culto satánico, quienes atacan violentamente a la pareja. La sangre derramada y el terror no son lo único que el culto deja en esa casa. Todo lo que continúa son una serie de hechos siniestros, catastróficos, llenos de exorcismo y sangre. Antes de su estreno viene con un fuerte marketing. Desde el comienzo intenta generar suspenso, intriga y terror. Al espectador en algunas secuencias le producirá sobresaltos, escalofríos e interés. El director es un generador de distintos climas, la cámara se sitúa bien en los momentos requeridos y tiene sorpresas, cumplen un rol importante, personajes infaltables como un sacerdote de apellido Perez (Tony Amendola) y un personaje cuyo nombre es Evelyn (Alfred Woodard). Se ve un breve homenaje a la película “el bebé de Rosemary” solo por la escena que se ve el cochecito del bebé. Todo lo que sigue es previsible y, para aquellos que vimos muchas de este género, no hay tantos elementos que sorprendan. Solo nos resta esperar el 2016 porque esto continúa.
Mezcla: la aventura, la acción, la comedia, el romance, la música y habla sobre: el amor, la amistad y la familia. Se cuenta una historia original, con una perfecta animación, muy colorida y de gran estética, que la hace bella. Cuenta la vivencia de 5 niños en una excursión escolar. Van a un museo, allí quien es la guía les cuenta la historia que se encuentra “El libro de la vida”, conjuntamente con estos niños y los espectadores conocemos a los personajes de esta fábula en un pueblo, están los protagonistas: María (Zoe Saldana), Joaquín (Channing Tatum) y Manolo (Diego Luna), son tres amigos y los dos chicos se encuentran enamorados de la misma mujer, ambos intentarán con sus distintas armas conquistarla. Estos son conducidos por Xibala (Ron Perlman) y La Muerte (Kate del Castillo), esta última es líder de la Tierra, forma parte de los recuerdos y las almas irán a un lugar maravilloso, en cambio Xibala pertenece al Olvido, donde las almas no son recordadas por nadie y están solas.Hay una apuesta entre Xibala y La muerte con el correr de la cinta conoceremos su resultado, llena de magia, enigmáticos, sorpresas y trampas. La película tiene varios puntos a favor: se encuentra producida por Guillermo del Toro, en algún punto cuenta con alguna similitud al film "El cadáver de la novia" de Tim Burton y la banda sonora pertenece al talentoso argentino ganador de dos Premios Óscar Gustavo Santaolalla (¿irá camino a otro premio Óscar?). La música tiene un toque latino de canciones populares de Munford and Sons ("I Will Wait"), Elvis Presley ("Can't help falling in love"), Biz Markie ("Just a Friend"), Radiohead ("Creep), entre otras. Surgen las aventuras, los engaños, la separación, el dolor, el amor, desafíos, los mandatos, mitos, leyendas, humor y se encuentra llena de personajes. Una historia para conocer otras culturas como la mexicana, se desarrolla el Día de los muertos, toca el tema de la muerte, un tema bastante traumático para los niños y a veces también para los adultos. Con un gran despliegue visual, didáctica, con encantamiento, ilusión, entretenida, emociónate, e incluye varios mensajes.
La venganza y la furia en las manos de Denzel Washington. Inspirada en la popular serie televisiva de los años 80 del mismo nombre (The Equalizer), en español sería algo así como “El protector” el director Antoine Fuqua vuelve a elegir por segunda vez a Denzel Washington, con quien ya habían trabajado juntos en "Día de entrenamiento" (2001), recordemos que por esa interpretación resultó ganador de un Premio Oscar (ya había ganado por “Tiempos de gloria”, 1989 de: Edward Zwick). Además en esta oportunidad es el productor del film. Muestra a un hombre simple, llamado McCall (Denzel Washington) que trabaja en una fábrica, es buen compañero, tranquilo, ordenado, prolijo, metódico, vive solo, es viudo, y en sus horas libres se dedica a leer.Por la noche en ese bar donde concurre conoce a una joven Teri (Chloe Grace Moretz), maltratada y obligada a prostituirse por las mafias rusas de la Costa Este. Un día ante un hecho brutal siente la necesidad de ayudarla y salvar a varias jóvenes de una red de prostitución y drogas, que lo lleva a enfrentarse contra fuerzas extranjeras muy poderosas, allí se encuentra con Teddy (Marton Csokas, “Noé”), un sanguinario sicario ruso. A partir de esto y otras situaciones injustas, él saldrá a la calle transformándose en un justiciero y contará con una gran capacidad a la hora de defender a quienes se encuentren en peligro, un personaje similar a: Charles Bronson, Steven Seagal, entre otros; más moderno, tiene algunas habilidades especiales, como las tenía MacGyver, Jason Bourne y se transforma en un superhéroe. La historia tiene alguna similitud a otros films como: "Búsqueda implacable"; "Promesas del este", de David Cronenberg, y "Taxi Driver", de Scorsese; entre otras. Contiene mucha acción, es muy violenta, con gánsteres rusos ultraviolentos, hay más de un villano odiable, llena de venganza, con escenas bien sanguinarias, algún toque de humor, buenos diálogos, momentos dramáticos y emotivos. Buena fotografía y banda sonora, vibrante, muy previsible, pochoclera y entretenida.
Drácula muestra su lado humano, como así también el lado oscuro, protagonizado por el británico Luke Evans (35). Se realizaron muchas películas relacionadas con Drácula, más de ciento cincuenta y por lo general ha resultado rentable, y en esta ocasión se ve un poco más rentable ya desde su subtitulo “la historia jamás contada” el espectador al leer esto se siente intrigado y quiere saber que le van a contar de diferente. El director Gary Shore es oriundo de Artane en el lado norte de Dublín, este es su primer largometraje, donde va mezclando el drama con el terror, lo muestra a Drácula con sentimientos, más humano, lo pone más como un superhéroe (algo similar ocurrió con “Malefica”), y no como un terrorífico vampiro. Su narración combina la verdadera historia de Vlad Tepes, el Empalador (fue príncipe de Valaquia, hoy el sur de Rumania, entre 1456 y 1462), y lo combina con la mitología de vampiros que relata los orígenes de Drácula que termina no siendo el monstruo que conocemos. Va narrando la historia en off del joven príncipe, Vlad Dracul, hijo del príncipe dragón de Transilvania. Es padre de familia y protector de su pueblo, acá los villanos y el mal están corporizados en los turcos, estos reclaman el pago de impuestos y además el Sultán Mehmet II quiere mil jovenes para la guerra incluyendo a su hijo pequeño Ingeras (Art Parkinson, “Juego de tronos”), al negarse, todo indica que se aproxima una terrible guerra. Vlad (Luke Evans, “Immortals”, “Furia de titanes”, “Rápido y furioso 6”), conoce a la perfección sus limitaciones, se encuentra preocupado por su familia y su pueblo, va a la montaña para encontrar una salida, allí se encuentra con la criatura del mal algo similar ocurría en el clásico “Fausto” (que hace un trato con el diablo), de esta forma adquiere fuerzas sobrenaturales, él tiene la potencia de mil hombres. Las batallas son impresionantes, con muchos matices de fantasía fiel al estilo estadounidense, un ejército de murciélagos, él vale 1000 hombres a la hora de luchar, apoyada con: efectos digitales, secuencias de acción y buenos escenarios, el entretenimiento está asegurado en una película bien pochoclera. Como actores secundarios: Sarah Gadon (Como Mirena, la esposa del Conde), Dominic Cooper (Mehmed, el villano), Art Parkinson (Ingeras hijo de Drácula) y Zach McGowan (es Shkelgim), le dan una vuelta de tuerca y queda abierta para una segunda parte.
Una comedia coral que cuenta con dos estupendas actrices. Esta es la ópera prima del director Maximiliano Pelosi (dirigió documentales como: “Otro entre otros" 2009 y "Una familia gay" 2013, además participó en la producción de películas como "El cine de Maite" 2008 y "Un año sin amor" 2004). Cuenta con las actuaciones: Betiana Blum, Lucrecia Capello, Manuel Vicente, Carlos Kaspar, Mosquito Sancineto, Emilia “Picky” Paino, Bernarda Pagés, Luciano Linardi, Ingrid Grudke, Juana Repetto y gran elenco. Narra las vivencias de dos hermanas, ellas son las chicas del tercero: Celia (Betiana Blum), una solterona que nunca perdió las esperanzas de casarse, y Aída (Lucrecia Capello), una mujer viuda, administran un consorcio, una vida que gira en torno a los chismes sobre todos sus vecinos. Ambas esperan la llegada de Marita (Ingrid Grudke), la única hija de Aída, que se encuentra radicada en Canadá, y viene para llevarlas para que vivan en Toronto, conozcan allí el resto de su familia y continuar todos juntos el resto de sus días. Por el lado de Celia, no tiene ningún compromiso en Argentina y acá no dejaría a nadie. Pero el conflicto está al caer, a Celia le sucede algo impensado quien le declara su amor es Ángel (Manuel Vicente) el encargado del edificio; y por el lado de Aída en medio de plena mudanza, desparece un collar de perlas, de esta forma el director nos muestra mejor a cada uno de los personajes ingresando al departamento de cada uno de ellos, sus traumas y nos ofrece un sinfín de situaciones. Es una historia coral, se mete en un mundo real como la propiedad horizontal, con otra trama algo similar ocurría en “La comunidad” de Alex de la Iglesia. Por momentos tiene un ritmo ágil, algunas escenas tienen un toque nostálgico, de humor y situaciones absurdas. Las actuaciones son correctas, algunas se destacan sobre otras y cuenta con buenos diálogos.
Una comedia familiar sin demasiadas pretensiones. Este largometraje llega a partir de un libro de dibujos para niños, un clásico de 1972 de Judith Viorst (escritora, periodista e investigadora del psicoanálisis, actualmente tiene 83 años) del mismo nombre que ha vendido más de dos millones de ejemplares. El film gira en torno a las aventuras de una familia. Alexander Cooper (Ed Oxenbould), de 11 años, tiene un día particular de mala suerte, para él terrible y horrible en vísperas a su cumpleaños. Amanece con un chicle pegado en su cabello, nadie irá al festejo de su cumpleaños, todos tienen otro compromiso, incluyendo a Becky Gibson (Sidney Fullmerque) la chica que le gusta y todo culmina con un incendio en el laboratorio de la escuela. Cuando él intenta hablar con su familia nadie parece comprenderlo. Ben Cooper (Steve Carrell) su padre se encuentra sin trabajo y por ahora es ama de casa,la madre Kelly (Jennifer Garner) trabaja en una editora, su hermano más pequeño (Dylan Minnette), la hermana que quiere ser actriz, Emily (Kerris Dorsey), y un hermano con algunas obsesiones, Anthony (Dylan Minnette). Una noche Alexander tiene un deseo: que toda su familia tenga y sepa lo que es tener un día horrible y terrible, como el título del film. Lo que continua son una serie de desventuras, algo divertidas y bien alocadas, donde la familia de Alex vive un día terrible, Emily con varios inconvenientes el día de su debut teatral, su hermano Anthony enfrenta un examen de conducir catastrófico, su padre Ben sufre en una entrevista de trabajo, Kelly, por un error de impresión la conduce al desastre y varias situaciones complicadas que tiene la familia. Como resultado final nos encontramos frente a una comedia familiar, llena de enredos y momentos desopilantes, dirigida por Miguel Arteta ("Youth in Revolt"), cuenta con las buenas actuaciones de dos comediantes como: Steve Carell y Jennifer Garner, resulta un buen pasatiempo, tocan sin profundizar el tema del bullying y contiene mensajes positivos. Un corte similar a "Mi pobre angelito" y “Quisiera ser grande", entre otras.
Un Woody Allen auténtico. Todo comienza en un elegante teatro de Berlín de 1928 decorado con un estilo oriental. En el escenario se encuentra un elefante y el ilusionista Wei Ling Soo lo hace desaparecer y también ejecuta otros trucos, viste una ropa típica y unos alargados bigotes; detrás de todos esos detalles esconden su identidad, él es Stanley Crawford (Colin Firth). Luego viaja a la costa azul en Francia, y todo se comienza a desarrollase en lugares bellísimos, conservando el estilo de la época dorada del jazz, para esto Allen sigue trabajando con el director de fotografía iraní Darius Khondji, todo se complementa con una muy buena dirección de arte manteniendo lugares elegantes, coches de época, mansiones, entre otros elementos y la elegancia de los caballeros y las damas a cargo de la diseñadora Sonia Grande. Una vez allí, el soberbio, arrogante y cascarrabias Stanley Crawford cuando conoce a Sophie Baker (Emma Stone) quien dice ser médium, no le cree y decide desenmascararla. Todo lo que continua es una serie de acontecimientos y un abanico de personajes. Estupendamente bien interpretada por: Emma Stone, Colin Firth, este último da clases de actuación, elegante, fascinante y con encanto. Ambos tienen muy buena química, habla de los amores imposibles, con ritmo ágil y diversión, una dirección de arte deslumbrante, buenas locaciones elegidas para esta nueva historia del siempre creativo Allen. La música sigue fiel a su estilo, con diálogos inteligentes y filosóficos, disputas entre Nietzsche y Freud, entre otros.
Algunas escenas quedarán grabadas en las retinas de los espectadores. Todo comienza mostrando a un exitoso abogado Hank Palmer (Robert Downey Jr.), arrogante, ambicioso, agrandado, que gana sus casos y suele decir que los inocentes no pueden pagarle, se encuentra divorciado de su esposa y lucha por lograr la tenencia de su hija. Un día recibe un penoso mensaje ha muerto su madre y vuelve al hogar de su niñez, una vez allí se reencuentra con sus afectos, como así también con su padre, que es el juez de la ciudad, Joseph Palmer (Robert Duvall), de gran prestigio. Pero ellos tienen una pésima relación, repentinamente su padre es sospechoso de asesinato por la muerte de un ciclista cuya sangre coincide con la que el policía acaba de encontrar en su coche, entre otras pruebas. Su hijo Hank decide descubrir la verdad y defender a su padre, quien llevo de manera intachable 42 años en sus funciones y además este hombre se encuentra enfermo, de esta forma se van mezclando los problemas familiares con los del juicio, como así también su relación con: sus dos hermanos Glen y Dale Palmer (Vincent D'Onofrio y Jeremy Strong), la novia de la juventud Samantha Powell (Vera Farmiga, "Infriltrados") y Carla Powell (Leighton Meester), la hija de esta. No cuenta con un gran guión, la trama gira en torno al juicio, siendo un thriller de abogados, pero también está el ambiente sentimental y familiar, afloran las situaciones sin resolver, con el fin de distender un poco al espectador hay varios gags. Las actuaciones de Robert Downey Jr. y Robert Duvall, crecen en cada parlamento, van creando diferentes climas que son excelentes, que lo van llevando al espectador a meterse cada vez más en la trama. Un duelo actoral y las escenas que están juntos en pantalla sacan chispas y tiene momentos memorables. Quizás le sobren algunos minutos y por eso caigan en lugar comunes, pero las secuencias que se encuentran ellos son sublimes. También se lucen los actores secundarios: Vera Farmiga, Vincent D´Onofrio y Billy Bob Thornton; uno de los problemas es que contiene muchas subtramas algunas funcionan y otras no tanto y hay una buena vuelta de tuerca. Es muy probable que los protagonistas se encuentren nominados en la próxima entrega a los Premios Oscar.