Una nueva pandemia de zombies Gerry Lane (Brad Pitt), un investigador de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), deberá enfrentar una increíble pandemia que se extiende por el mundo. Un virus está convirtiendo a los humanos en seres monstruosos, suerte de zombies, muertos resucitados y amantes de la carne humana. Lane es llamado para recorrer puntos estratégicos, detener el horror y lograr alguna vacuna, que, de alguna manera, ponga a salvo a la humanidad. El investigador partirá con Karin (Mireille Enos), su mujer y sus dos hijas, Constance (Sterling Jenins) y Rachel (Abigail Hargrove) y su primer refugio será un portaviones, en medio del océano, luego vendrá Corea del Norte e Israel. La película está inspirada en el libro "Guerra mundial Z. Una historia oral de la guerra zombie", del joven escritor Max Brooks, hijo del humorista, actor y director Mel Brooks y la desaparecida Anne Bancroft, que ha tenido un pronunciado éxito en los Estados Unidos. Esta versión fílmica bastante libre descarta el lugar de origen del virus, China, y remite la expansión de la plaga a partir del tráfico clandestino de órganos. EL DISEÑO VISUAL El filme tiene un impactante diseño visual, variedad de efectos especiales y algunas escenas francamente impactantes, como la de la escalada al portal construído por Israel para impedir el paso de los monstruos, suerte de hormiguero humano en alto, de impresionante movimiento y la de la caída del avión. El director Marc Forster, el mismo de "007 Quantum of Solace", la película de James Bond, maneja la historia con impecable ritmo y singular manejo de las escenas de masas. Crea una atmósfera verdaderamente terrorífica, rica en planos generales y panorámicas mmultitudinarias. Su thriller muestra un correcto Brad Pitt y dos actrices interesantes, Mireille Enos (Karin) y la israelí Daniella Kertesz (Segen). La película intenta ser una crítica sociopolítica referida a casos de corrupción, relacionados con distintos aspectos gubernamentales.
Superman sigue siendo bueno "El hombre de acero" respeta las bases de la historia original, mostrando el nacimiento del superhéroe en un planeta en crisis, llamado Krypton y su envío a la Tierra para salvarlo. El filme de Zack Snyder es rico en efectos visuales y tiene una cuota de sombra y melancolía que puede llegar a desconcertar a los admiradores de Superman, acostumbrados a los brillos y multiplicidad de colores de películas anteriores. La figura de Superman nace como cómic de la mano de Jerry Siegel y Joe Shuster. Se crea en 1932 cuando los efectos de la Depresión en los Estados Unidos y el mundo, hacían más necesaria que nunca la existencia de un superhéroe de poderes sobrenaturales, que pudiera ayudar imaginativamente al hombre común, tan maltrado por la economía. "El hombre de acero" respeta las bases de la historia original, mostrando el nacimiento del superhéroe en un planeta en crisis, llamado Krypton y su envío a la Tierra para salvarlo. Jor-El (Russell Crowe), el científico, padre del niño, opuesto al régimen vigente en el planeta, sabrá los problemas que tendrá su hijo en esa Tierra lejana, donde con el nombre de Clark Kent/Superman (Henry Cavill) se transformará en un tímido periodista de ambigua vida, que une poderes sobrenaturales y situaciones tan comunes como enamorarse de la encantadora Luisa Lane (Amy Adams). CARA DE NIÑO El filme de Zack Snyder es rico en efectos visuales, respetuoso de la historia original y tiene una cuota de sombra y melancolía que puede llegar a desconcertar a los admiradores del superhéroe, acostumbrados a los brillos y multiplicidad de colores de películas anteriores. Aunque el diseño se apoya en lo último que puede verse en tecnología digital. Este "hombre de acero" puede con todo, es un buen hijo criado en Kansas por Martha (Diane Lane) y Jonathan Kent (Kevin Costner) una pareja de granjeros, sufre la presión adolescente, viaja a la Antártida y se destaca en una guerra multiestelar, donde reaparece el malo muy malo del general Zod (Michael Shannon). En cuanto a la labor específica del héroe, ya no es el Santo Grial, o el Vellocino de Oro, sino el codiciado códice que asegura la especie. Abundan los enfrentamientos, el kick boxing, el box, rehabilitando la lucha cuerpo a cuerpo con la nueva imagen del héroe -a cargo de Henry Cavill-, imponente corporalmente, e infantil en cuanto al rostro, en la línea de Christopher Reeve (uno de los primeros actores que asumió el papel del superhéroe), aunque, por ahora bastante inexpresivo.
Una comedia algo superficial El argumento de este filme es parecido al de "La jaula de las locas", pero carece del ingenio de aquella obra teatral. Resulta curioso, que este equipo de grandes actores hayan aceptar trabajar en esta comedia. El argumento de este filme es parecido al de "La jaula de las locas", pero carece del ingenio de aquella obra teatral. En el caso de la pieza de Jean Poiret, un muchacho en tren de casamiento, quería disimular que su padre vivía con un travesti, para que no alterará la moral tradicional de sus suegros. En "El gran casamiento", Alejandro (Ben Barnes), un muchacho que se quiere casar y es hijo adoptivo de Don (Robert De Niro) y Ellie (Diane Keaton), una típica pareja estadounidense, pide a sus padres que oculten su separación, porque Madonna (Patricia Rae), su madre biológica de origen colombiano, vendrá al casamiento y es una mujer muy creyente. Pero nada saldrá como esperan. Porque también está Bebe (Susan Sarandon), la mujer actual de Don y los padres de la novia, uno de los cuales tuvo una relación con Ellie. Además, Madonna, la madre biológica de Alejandro, no viene sola y Nuria (Ana Ayora), la chica que la acompaña, que no tiene nada de pudorosa, pondrá en apuros a más de uno. LOS AMERICANOS Esta comedia superficial, de argumento inverosímil, abundante en clichés, lugares comunes y situaciones poco divertidas, pero que pretenden serlo, tiene un equipo actoral que muchos envidiarían, pero, o Justin Zackham, el director, es un gran negociador y vendedor de fantasías y peces de colores, o hay algún misterio en la aceptación de este elemental producto. Hay momentos de sexo de mal gusto, respecto de los inconvenientes por los que atraviesa el futuro marido y cierto racismo en las marcaciones de los personajes latinoamericanos. "El gran casamiento" tiene varios minutos de más, el personaje de Don (Robert De Niro), que es un escultor, exhibe todos los defectos que puede tener un hombre que actúa como un "pelele" prejuicioso y las mujeres son presentadas como en una comedia universitaria de "nerds", desvalorizadas, triviales, serviles y tontas. Desde ese punto de vista resulta curioso, que este equipo de grandes actores hayan aceptar trabajar en esta comedia.
Rumores sumamente peligrosos Con delicadeza y gran tacto, el director aborda el tema de la mentira convertida en rumor y las consecuencias de lo que cualquier rumor puede hacer en la vida de una persona. Impecable formal y actoralmente, la película tiene un final discutible, pero es imprescindible para que los adultos mayores la analicen. Lucas (Mads Mikkelsen) es maestro de primaria. No está pasando un buen momento. Desocupado, con un trabajo temporario en un colegio infantil de su pueblo, acaba de establecer una nueva relación con una chica extranjera y lucha por ver Marcus (Lasse Fogelstrom), su hijo adolescente. Su aguda sensibilidad, quizás vaya en contra para atenuar el dolor del fracaso de la relación y las pocas palabras que imponen su carácter, no es lo mejor para relacionarse con esa pequeña sociedad que habita. Estamos en las afuera de Dinamarca, el frío aprieta. La naturaleza involucra a todos los que practican la caza y luego de dedicarse a lo que no consideran cruel (la muerte de animales salvajes) se arrojan al agua helada para atemperar sus rudos caracteres. Lucas hace amistad con la hija de su gran amigo Theo (Thomas B Larsen). Clara (Annika Wedderkopp) tiene cinco años, asiste a las continuas peleas de sus padres y carece de comunicación con mayores, demasiado preocupados por sí mismos. Lucas le dedica tiempo y alegría, por eso ella se siente molesta cuando algo parece separarlos. Y arroja una mentira como una botella al mar. La encargada del jardin de infantes recoge la mentira, la madre y el padre serán los que se enterarán después y la comunidad al final. La respuesta no se hará esperar y será cruel. UN TEMA DIFICIL El director de la recordada "La celebración", Thomas Vinterberg, con una mano ideal para tratar asuntos difíciles, elabora una suerte de red que encierra algo tan particular como una mentira. Pero una mentira que puede dañar a muchos y destruir a algunos. Y un pueblo lo cree y se fanatiza. Desde los padres de la pequeña ("Los niños no mienten", dice segura Grethe (Susse Wold), la madre), hasta los que,"por si acaso" comienzan a hacer a un lado al presunto culpable. Con delicadeza y gran tacto, el director aborda el tema de la mentira convertida en rumor y las consecuencias de lo que cualquier rumor puede hacer en la vida de una persona. Con un argumento similar al que Lilian Hellman planteara en "La hora de los niños", que William Wyler llevara a la pantalla, la película subraya un problema actual que puede destruir la vida de un individuo, o desencadenar un drama y que en varios casos ha causado tragedias que involucraron a personal profesional, no sólo en nuestro país. Impecable formal y actoralmente, la película tiene un final discutible, pero es imprescindible para que los adultos mayores la analicen.
Un padre y su hijo en lucha La tierra fue devastada hace mil años y la gente debió emigrar a otro planeta. Allá organizaron una nueva sociedad. Aparecieron los Rangers como defensa y la vida continuó. El general Cypher Raige (Will Smith), justamente un superior de los Rangers, varias veces condecorado por sus acciones, formó su hogar y ahora tiene problemas con Kitai (Jaden Smith), su hijo adolescente que quiere ser un Ranger como él, pero no puede calificarse. El chico primero deberá aprender a obedecer, tener conciencia de su responsabilidad y ubicar su incipiente soberbia en los trece años que cumplió. Aconsejado por su mujer Faia (Sophie Okonedo), Cypher Raige decide hacer un viaje de conciliación con Kitai. No sabe que su destino va a cambiar una vez más. En una sociedad que valoriza la ciencia y la espiritualidad, la naturaleza con una lluvia de meteoritos va a ser el detonante de un cambio de rumbo en su destino. En pocos minutos Raige resulta gravemente herido y deberá ayudar a su hijo para que encuentre la herramienta imprescindible para poder despegar. MONSTRUOS VARIADOS Nuevamente la dupla integrada por Will Smith y su hijo Jaden. A los dos los conocimos en "En busca de la felicidad", donde hicieron un buen papel como el hombre que luchaba para sobreponerse a su circunstancia con su pequeño hijo. En "Después de la tierra" ambos, padre e hijo tratan de sobreponerse a sus circunstancias en un lugar hostil, la Tierra donde han caído, un lugar que se caracteriza por una evolución que va contra el ser humano. Cypher alentará a su hijo en la búsqueda de la salvación y sus consejos lo van a acompañar en la aventura. El asunto es que las aventuras no son tales, algún que otro monstruo menor, babuinos incluídos, algo desagradables por sus afilados colmillos, pero nada llamativos, ni que despierten demasiada tensión. Algún Ursa que huele el miedo y pajarracos menores. Nada impactante e inmerso en un ritmo sin demasiadas tensiones. Filmada en Costa Rica con ciertas escenas que recuerdan a "Oblivion", o imprevistos que levanten la acción, "Después de la tierra" exhibe una cuidada batería de efectos especiales, monstruos que dejan bastante que desear y correctas actuaciones de Will y Jaden Smith (en los papeles de Cypher y Kitai) actores correctos en lo que está ausente la singular magia que los unió en "En busca de la felicidad". Prolija formalmente, con raccontos y reflexiones en off, más un cuidado formal y buen diseño de producción, esta nueva película de M. Night Shyamalan, no logra alcanzar el dominio y equilibrio de "Sexto sentido", su recordado filme de 1999, con el que se hizo conocido. A esto se une un guión bastante chato y sin mayores sorpresas.
Una cantora de todo el mundo El filme, estructurado como un documental, registra la trayectoria de la gran Mercedes Sosa, fallecida en 2009. La película cuenta sus inicios en su Tucumán natal y como ella misma dice: "hija de un matrimonio pobre, pero con una familia maravillosa", inicia una carrera increíble al ganar un concurso en LV12, una radio local de su ciudad, San Miguel de Tucumán, ocultando el hecho a su padre que no simpatizaba con la idea de una carrera artística para su hija. NUEVO CANCIONERO Luego de participar en el "Manifiesto del Nuevo Cancionero" con Armando Tejada Gómez, Oscar Matus, su primer esposo y otras importantes figuras, su repertorio acentúa la búsqueda de una música nacional de contenido popular y se centra en la situación de América latina y las luchas por la tierra. "Mercedes Sosa: La voz de Latinoamérica" abarca un completo registro de imágenes y sonidos, con reportajes realizados por su hijo Fabián Matus, tanto a sus parientes y amigos tan queridos, como a figuras internacionales de la música. Así desfilan Chico Buarque, Pablo Milanés, David Byrne, Milton Nascimento, Isabel Parra, Charly García, Víctor Heredia, León Gieco, Fito Páez, Teresa Parodi y Abel Pintos, entre otros. LA OPORTUNIDAD Desde 1965, su consagración en el Festival folklórico de Cosquín, de la mano de Jorge Cafrune, que le da la oportunidad; el rumbo de su carrera toma un giro definitivo, que va a pasar por el exilio político. Amenazada en la década de 1970, por el grupo La Triple A, se exilia y paradójicamente logra la definitiva consagración internacional. Chico Buarque, su gran admirador, destaca la difusión que hace de las canciones de la chilena Violeta Parra. Un lugar especial en el filme es para el recuerdo de doña Emma, la madre de Mercedes, su segundo esposo Pocho Mazzitelli, fundamental en su repertorio y en su vida y por supuesto, su adorado hijo Fabián. El recital de Pablo Milanés con su invitación a Mercedes Sosa para cantar "El tiempo pasa", presenta una secuencia de sentido valor emocional. La película es un valioso testimonio que permite disfrutar de lo mejor del repertorio de esta cantora universal y recordar su voz y su presencia, que, indudablemente, cambió el panorama de la música popular en la Argentina.
Una aventura interplanetaria Este nuevo filme animado trata una historia familiar. Hay un héroe popular que triunfa en el mundo interplanetario y es famoso en televisión. Su nombre es Scorch Supernova, el mismo cuyo hermano llamado Gary, es jefe del "Control de misiones de la Basa". Mientras Scorch tiene un romance con la reportera de televisión y es admirado por su pequeño sobrino Kip, hijo de Gary, se está tramando un engaño para hacerlo caer en una red galáctica. Efectivamente el SOS del llamado Planeta oscuro (la Tierra), lo lleva al rescate sin pensar en las consecuencias, ni en la disconformidad de Gary. Como bien lo pensaba su hermano, Scorch es capturado lejos de su planeta natal, Baab. Allí se pondrán en juego, las astucias y los vínculos familiares para tratar de liberarlo del malo, muy malo general Shanker, un terráqueo resentido y megalómano, que lidera un feroz ejército de hombres armados. UNION FAMILIAR "Héroes del espacio" es una película de estructura tradicional, dirigida a los más chicos, aunque como es ya habitual en los filmes para toda la familia, se incluyen alusiones y temas que son más digeribles para los adultos que para los pequeños. Como siempre, los personajes son atractivos visualmente y algunos bastante graciosos, especialmente los animales. El brillo de los colores y su variedad apunta también a los más chicos, así como las locaciones y el ritmo. Conceptos como "la unión hace la fuerza", la necesidad de la participación familiar para que la acción tenga éxito, la cooperación, el respeto y la fuerza de los débiles son valores universales que se dan en esta comedia familiar, destinada, repetimos, especialmente para los más chicos.
Una alegría que es contagiosa Canciones por las que pasa la melancolía, el amor, en las que abunda el concepto de sueño realizado, las experiencias positivas y la alegría compartida, coinciden en un filme ideal para los fans de los "Teen Angels". El filme presenta un grupo juvenil que se origina a partir de una exitosa serie televisiva Ñ"Casi ángeles"- que se mantuvo al aire con éxito por tres años y medio y fue creada por la productora y compositora Cris Morena ("Chiquititas"). Integrado originalmente por Gastón Dalmau, Nicolás Riera, Juan Pedro Lanzani, Mariana Espósito y María Eugenia Suárez, el actual grupo incluye a Rocío Igarzábal, ante la desvinculación por motivos que se desconocen de la joven María Eugenia Suárez. Heredera del éxito televisivo, la banda se convirtió en suceso para adolescentes y pre adolescentes, grabando varios álbumes y recorriendo distintos puntos geográficos del interior y el exterior, donde repitió su éxito y se independizó de la serie televisiva en 2011, para finalizar su actividad un año después. LOS CHICOS CANTAN Y BAILAN Esta película muestra su último recital en julio de 2012, en el Cine Gran Rex, de Buenos Aires con la asistencia entusiasta de más de tres mil doscientos jóvenes. El filme matiza imágenes del concierto en vivo, con tomas de los admiradores en la sala, así como reflexiones de los chicos que integran el grupo sobre el mismo fenómeno que representan. De esta manera pasan revista a sus seis años de integrantes de la serie televisiva, sus emociones, anécdotas y posteriormente su participación en la banda. "Teen Angels: El adiós 3D" tiene formato tradicional, es visualmente atractiva y transmite mucha energía adolescente. Incluye todas las canciones de la banda y puede disfrutarse de la simpatía de sus jóvenes integrantes -Gastón Dalmau, Mariana Espósito, Rocío Igarzábal, Juan Pedro Lanzani y Nicolás Riera-, fascinados por la experiencia, tanto como sus admiradoras deslumbradas por el desempeño del grupo. Canciones por las que pasa la melancolía, el amor, en las que abunda el concepto de sueño realizado, las experiencias positivas y la alegría compartida, coinciden en un filme ideal para los fans de los "Teen Angels".
El de la motosierra revivió La original "Masacre de Texas" de Tobe Hopper, data de 1974. Aquel filme fue realizado con bajo presupuesto y se convirtió rápidamente en uno de los éxitos cinematográficos más importantes de las historias de terror. Nadie que la vio pudo olvidar a la familia que viaja a Texas para ver la tumba de un pariente cercano y es atacada por un grupo familiar caníbal. Por supuesto que hubo remakes, precuelas o como se llamen, desde entonces hasta ahora y para incorporarse a la franquicia se estrena ésta, que retoma al personaje más pequeño de la familia Miller, una niña y la transforma en la heredera de una casona victoriana en la que vivieron sus antepasados. Ella se llama Heather Miller (Alexandra Daddario) y nada que ver con el personaje de la original de Hopper, porque ahora pasaría los cuarenta años y ella se ve rozagante y muy joven. Por supuesto que la heredera se encontrará con el horror de Leatherface (Dan Yeager), el famoso asesino y su aventura ingresará a un universo imprevisible, aunque estará acompañada por un grupo de amigos, que se sabe tendrán un triste destino. TERROR PEDESTRE Con seis películas anteriores, esta "Masacre en Texas 3D. Herencia maldita", se regodea en el terror más pedestre y no abandona la idea central del loco de la motosierra. Eso sí, centra su atención en la linda heredera que se entera que es adoptiva y se propone descubrir algo más sobre lo que se le ocultó y que puede esconderse, como en "El barril de amontillado" de Poe, en las bodegas de la casa. El filme abunda en tomas con cámara subjetiva y a la trama central se agregan subtramas que no cierran totalmente y no siempre motorizan la acción. Su final resulta bastante ambiguo. Una curiosidad. Al desfile de chicas lindas de la película, encabezado por Alessandra Daddario, se suma un chico muy atractivo llamado Carl, que es interpretado por el hijo de Clint Eastwood y un conocido consultor, Keram Malicki Sanchez, especialista en la vida real en cruces de arte y tecnología y que en el filme personifica a Kenny, uno de los amigos de Heather.
Disparatados enredos en Las Vegas Divierte más que las anteriores y se destaca especialmente a Zach Galifianakis (Alan) y Ken Jeong (Mr. Chow), médico y cómico en la vida real, de ascendencia coreana. Aunque también cumplen con una buena actuación Bradley Cooper (Phil), Stu (Ed Helms) y Justin Bartha (Doug). Sabemos que esta es una franquicia. Ya hubo dos de "¿Qué pasó ayer?" y tuvieron mucho éxito comercial, encuadradas dentro de la línea "amigos para siempre" -cuyo grupo está conformado por Phil (Bradley Cooper), el imposible Alan (Zach Galifianakis) y Stu (Ed Helms), a los que se suma Doug (Justin Bartha)-, con historias descabelladas, absolutamente superficiales, zafadas y divertidas. Esta vez la historia se inicia con un simpático gángster, conocido como Mr. Chow (Ken Jeon), que huye de una cárcel de Bangkok, Tailandia, hacia Tijuana, México. Pero de inmediato la película pasa a Estados Unidos para seguir la nueva locura de Alan, que como siempre, respetando su carencia de límites y su poco juicio, conduce por la carretera estatal, llevando en un pequeño remolque, una increíble jirafa. Con la que por supuesto desencadenará el caos por no calcular la altitud de un puente que se lleva puesto parte del pobre animal. LOS DIALOGOS Con este comienzo, bastante delirante se inicia la nueva película de esta serie, que muestra mayores inquietudes que las anteriores, cierta inteligencia en los diálogos y un humor más delirante, además de su característico ritmo vertiginoso. Desenfrenado y un poco loco, el filme va a meterse con el hampa, representada por un mafioso llamado Marshall (John Goodman), mostrar una buena escena de secuestro en medio de la ruta y el personaje de Mr Chow (Ken Jeong) en pleno desarrollo de una comicidad almodovariana, con ciertas vueltas de tuerca en el argumento, que van a convertir a los protagonistas en algo así como hampones de alto vuelo, capaces de desvalijar casas de magnates o protagonizar increíbles huídas por las terrazas de impensables hoteles de Las Vegas, donde sucede buena parte de la historia. Con atractivas locaciones en Las Vegas y más tarde algunas tomas en la ciudad de Tijuana, más un excelente ritmo y algunas escenas para recordar, como el singular diálogo entre Alan y Marshall (John Goodman), enfrentado a la pandilla que se completa con Phil, Stu y Doug. "¿Qué pasó ayer? Parte III" divierte más que las anteriores y se destaca especialmente a Zach Galifianakis (Alan) y Ken Jeong (Mr. Chow), médico y cómico en la vida real, de ascendencia coreana. Aunque también cumplen con una buena actuación Bradley Cooper (Phil), Stu (Ed Helms) y Justin Bartha (Doug).